Premi Llibreter 2019
Dos novelas juveniles
Un lazo también con el levantamiento del fascismo de aquella vieja Europa, con la guerra a las puertas, tiene ‘Camins d’aigua’ (Barcanova), segunda entrega (autoconclusiva) de la trilogía ‘La llum d’Artús’, de Raimon Portell (Barcelona, 1963). Esta novela de aventuras, mezcla de ficción e historia, ha sido la premiada por los libreros como mejor obra de Literatura infantil y juvenil de Literatura Catalana, una categoría que el año pasado debutaba en los Llibreter junto a su equivalente en Otras Literaturas, que en esta ocasión ha reconocido ‘La canción del cuco’ (Bambú, en castellano y catalán), de Frances Hardinge. Esta novela de fantasía y misterios, “llena de paisajes oscuros y miedos” y con referencias constantes a los cuentos de hadas, orquestada por la británica, es, en opinión del jurado, digna sucesora de los grandes clásicos de la tradición inglesa para jóvenes.
El tradicional Premi Llibreter al Mejor libro ilustrado ha recaído en ‘Sirenas’ (Kókinos), primera obra de la californiana Jessica Love, que narra cómo el pequeño Julián teme que su abuela descubra lo mucho que le gusta disfrazarse y sentirse como una sirena. Según el jurado, es un libro infantil “valiente, que celebra el hecho de ser uno mismo a pesar de los prejuicios”.
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